Salud en tiempos de la Constitución Bolivariana

Adleys Coraspe

Para la organización mundial de la salud (OMS) faltan recursos humanos en muchas zonas del mundo, afirmó el doctor Tim Evans, subdirector General de Pruebas Científicas e Información para las Políticas de la OMS, quien señala que: “El personal de salud, piedra angular de los sistemas sanitarios, está atravesando una crisis en el mundo entero, crisis a la que ningún país escapa por completo”.

En todos los países capitalistas hay una escasez crónica de profesionales de la salud, producto de décadas de anemia inversora en la formación, remuneración, condiciones de trabajo, la formación para el libre ejercicio de la profesión, el crecimiento de la oferta privada en la atención a la  salud (realmente a la enfermedad); la gestión de esos profesionales, está dirigida a fortalecer el complejo médico industrial farmacéutico, lo cual nos ha llevado a la grave carencia de recursos humanos con conocimientos clave y un nivel creciente de cambios de profesión, jubilaciones anticipadas y migraciones nacionales e internacionales.

Desde el advenimiento del proceso constituyente y la constitución bolivariana liderado por Hugo Chávez F., ha provocado acciones para cumplir con la formación de médicos y otros profesionales de salud, para fortalecer el planteamiento de un Sistema Único, Público Nacional de Salud (SUPNS), fundamentado en Barrio Adentro, y proponiendo al mismo tiempo la creación de las Áreas Integrales de salud, que conjuntamente con la red ambulatoria especializada y la red hospitalaria, se constituya el SUPNS, un sistema basado en la Salud y no en la enfermedad.

Con las misiones Sucre y Alma Mater, se inicia la incorporación masiva de bachilleres al sistema de educación universitaria para la salud, nace así el Programa Nacional de Formación de Médicos Integrales Comunitarios. Los hijos de los proletarios pueden acceder a graduarse de médicos, para atender a su gente en el territorio donde habitan, impactando positivamente la cobertura nacional en los espacios rurales y en los urbanos desasistidos, o de difícil acceso o alto riesgo.

Hay consultorios populares, centros de diagnóstico integral -CDI-, salas de rehabilitación integral -SRI-, centros de alta tecnología -CAT- y clínicas populares en todos los municipios del territorio nacional., pero hace falta que funcionen todos, con buena dotación de equipos, insumos y personal y aumentar su número. Recordemos que las mal llamadas sanciones aplicadas por el imperio gringo-europeo, han influido negativamente en la red de salud, situación que el gobierno bolivariano del presidente Maduro está superando.

La formación de Médicos Integrales Comunitarios, van 13 cohortes, con cuarenta y nueve mil egresados MIC. (49.000), mientras los egresados de las otras universidades existentes solo alcanzan a 4000 médicos por año, casi todos dedicados a la medicina privada.

Son los hijos de Chávez, quienes desde el consultorio popular realizan la dispensarización, política de salud inclusiva y envolvente, para monitorizar las reales condiciones de salud e la población.

La realidad social, política y las estructuras organizativas de salud ancladas en el vetusto modelo de salud centrado en la enfermedad, es un lastre que resta velocidad al desarrollo del modelo de atención integral, donde se privilegia el hospitalismo y la especialización.

Subordinado a una perversión capitalista esta “división social del trabajo” convierte al ser humano en “porciones o fragmentos”, atendidos por super especialistas, se atiende a una parte del cuerpo y se deja de atender al ser humano.

La formación de recursos humanos para el área de la salud, es fundamental para garantizar una población sana capaz de luchar por su propio desarrollo. En ella deben participar además del Estado, las comunidades, los profesionales del área de la salud, sociedades científicas involucradas y la academia, e especial las universidades responsables de la formación y actualización, para mejorar la planificación, la formación, el empleo, la efectividad y la eficiencia de la fuerza laboral sanitaria.

Tarea encomendada por Chávez a las universidades, como a la de de Ciencias de la Salud. Que lleva su nombre Hugo Chávez -UCSHCh.

La UCS forma, además de médicos, odontólogos, enfermeras, optometristas, ópticos, citohistotecnólogos, fisioterapistas, terapistas ocupacionales, para fortalecer la red comunal, y también se forman especialistas en todas las áreas clínicas necesarias.

Faltan profesionales de la salud, las comunidades, las comunas, el poder popular puede hacer mucho, para construir espacios docentes en los barrios, zonas rurales e indígenas, en especial en consultorios populares, los comités de salud y las bases de misiones.

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